Chapter 61:

CAPITULO 6 PARTE 3: “regreso a Erithan”

Cronicas de Rigel


Las calles eran extensas y no se visualizaba el final; la ciudad apagada y funcional de Erithan estaba muy silenciosa esa noche, donde poco a poco empezaba a caer la nieve encima de ella.

—”Me pregunto cómo puede caer nieve en un lugar rodeado de un desierto...” —murmuró Shiro, viendo la ventana que estaba en la habitación donde durmió los primeros días, y donde Yuzuki le enseñaba lo básico como una maestra.

Shiro desvió su mirada al resto de la habitación: su cama totalmente ordenada, su mesa vacía de no ser por algunos libros y una lámpara apagada, y un ropero totalmente nuevo que nunca usaría, pues tampoco tenía muchas pertenencias en las que pensar.

Se acercó lentamente a la puerta de salida, sus piernas tambaleándose ligeramente en el piso, como si hace poco hubiera hecho una actividad física. Al estar a punto de salir, elevó la mano para jalar la manija, pero...

En vez de ello, se abrazó a sí mismo, su rostro mirando al suelo de forma suave; no se podía saber qué pensaba al tener un rostro tan apagado.

—”Me hice el valiente hace más de un mes, pero... ahora que no tengo a Alma... es raro, siento un vacío en mi estómago...”

Shiro se dejó caer en su cama, cerrando los ojos y durmiéndose rápidamente.

[...]

A las afueras de su habitación, el pasillo viajaba hacia la sala, para después llegar hasta la cocina, donde una persona reposaba en la encimera, observando la gran ventana reconstruida hace no más de mes y medio.

—”¿Qué fechas... nieve...” —murmuró Kira, observando la nieve caer afuera.

Frente a ella, una persona igual de alta jugaba con sus dedos, tratando de hablar con la persona que tenía al lado.

—”Señora Mizuki... ¿por qué Kaede y Shiro no salen de sus habitaciones...? ¿Pasó algo que no sabemos?”

Mizuki estaba con su bata blanca que le quedaba grande, y su cabello gris caía ligeramente, algo desordenado. Después de beber un poco del café que tenía al lado, habló:

—”Kaede está enojada conmigo... solo me dirige la palabra cuando necesita entrenar en la simulación... quiero decir, si le mentí por como una década sobre su pasado, pero es mejor que decirle que es una huérfana que perdió a toda su familia”.

Kaya escuchaba con atención, asintiendo cada poco.

—”No me incumbe, pero... ¿por qué Yuzuki no trata de hablar con ella? No la conozco mucho, pero claramente tiene autoridad sobre Kaede, ¿no?” —dijo Mizuki.

—”Cambiando de tema... ustedes dos sí que son unos monstruos, arrasaron en la prueba del golem de vidrio, me da pena... advertí muchas veces que no les hicieran la prueba” —dijo Mizuki, observando la ventana ligeramente.

Kaya se puso algo nerviosa, dándole la cara a Mizuki.

—”N-no pensé que ese monstruo fuera tan débil, me disculpo...”

Mizuki le vio de reojo, con su típico rostro tranquilo.

—”Tranquila, no te estoy regañando...”

Kaya asintió otra vez con la cabeza.

—”Por cierto, Mizuki... ¿dónde está Yuzuki? Ahora que lo pienso, no la veo hace rato, solo que no le tomé importancia” —dijo Kira.

—”Ah... está en una misión de exploración, debería volver mañana”.

Kira, al escuchar, simplemente desvió la mirada al pasillo.

—”Y Mimosa...? A él también lo noto raro últimamente...” —dijo Kira.

Mizuki bebió nuevamente un sorbo de su taza de café.

—”¿Hablas de Shiro? Pues, no sé exactamente qué le pasa... pero ustedes ya lo saben, aparentemente es un caminante... uno de estos días probablemente vuelva a hacerle una prueba, o aprovecho a mandarlos a todos a hacerse la prueba médica...”.

—”No, por favor” —respondió Kira.

—”A mí me dan miedo las agujas...” —murmuró Kaya.

Mizuki se rió por primera vez en toda la noche.

—”Bien... por cierto, ¿saben cuándo vuelve Selina y Calius? Ni siquiera me dijeron que saldrían” —dijo Mizuki con cierto enojo débil.

—”Ah... la señora Selina y el señor Calius no volverán hasta mañana” —dijo Kaya.

—”Eh? ¿Perdón?” —respondió Mizuki, algo incrédula.

—”Esos dos a veces se van sin avisar y vuelven el día siguiente; ambas nos terminamos acostumbrando” —dijo Kira.

Mizuki simplemente bostezó, desviando la mirada al pasillo.

—”Bien... pues en ese caso me iré a dormir, mañana tengo trabajo...”

Mizuki se fue por el pasillo.

Kira salió de la cocina, y Kaya se quedó sola.

—”El señor Calius no es un Valtherion... es el hermano menor de Kaede... su apellido real es Alhena... ¿será que Mizuki le ponga ese apellido cuando lo registren oficialmente como cazador...?”

Y así, Kaya se quedó pensativa, observando cómo la nieve seguía cayendo a las afueras del edificio del departamento 9.

Chaos
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