Capítulo 1: Nilo Azul

Parte 1

- Veras, yo estaba organizando unas cosas afuera, cuando de repente Akutah llego y te tenía en sus garras.

- ¿Akutah?

- Si, Akutah.

- ¿Y ese es? ¿Garras?

- Vamos afuera, pero con cuidado.

Alistair intento ponerse de pie pero no podía, pero Nilo rápidamente llego y monto su brazo sobre ella para que Ali se pudiera poner de pie, el rostro de Alistair y Nilo estaban muy cerca a lo que este no pudo evitar sonrojarse y su corazón latía con gran velocidad, pero Nilo parecía no darse cuenta de esto y solo lo miraba confundida.

Alistair dio pequeños pasos hacia la salida de la tienda mientras se apoyaba en Nilo, al salir, la brillante luz del sol aturdió un poco su visión, pero una vez esta se estabilizo, lo pudo ver. Una aldea llena de personas trabajadoras, ya sea acomodando las cosas, repartiendo comida, llegando en carretas, entre otras cosas.

- Esta es la aldea del Sol, no tenemos un nombre en específico, solo así, aldea del Sol.

Alistair solo asintió con la cabeza y Nilo siguió hablando.

- Y él es Akutah…

Una enorme nube de polvo se levantó sobre la aldea haciendo que todos los habitantes se cubrieran con telas, un dragón… Un enorme dragón había aterrizado. Se sabía que era de color purpura, pero estaba cubierto de mucha tierra y debajo de esta se alcanzaban a ver muchas cicatrices, ya sea por espadas o quemaduras.

Un enorme par de cuernos salían hacia atrás de la cabeza del dragón purpura seguida de cuernos más pequeños como si formaran una corona, aunque podía andar bípedo, prefería andar en cuatro patas, sus ojos eran negros como la noche y su rostro un poco extraño, a pesar de su tamaño, su cara era un poco…

- Idiota…

El silencio invadió el lugar, el dragón pareció entender lo que dijo Alistair, o más bien, si lo entendió.

Lo siguiente que paso, para Alistair fue una sorpresa, aunque sabía que cosas así pasaban, verlo tan de cerca fue extraño, en muchos sentidos.

- ¡A quien llamas idiota! ¡Idiota!

¿El dragón, hablo?

Parte 2

Alistair tenía una cara totalmente confundida, no podía creer lo que veía, mientras el dragón movía la mandíbula, podía escuchar muy claramente como una voz salía de esta, una voz algo grave como de un hombre adulto pero sin llegar a ser de un hombre grande con una enorme barba, era más bien una voz bastante normal.

El dragón era bastante grande, claramente era un dragón adulto, tenía varias cicatrices en su cuerpo que estaba cubierto por suciedad como tierra y arena del desierto, y sus enormes ojos eran ocupados en un su mayoría por las pupilas oscuras y unos prominentes cuernos sobresalían hacia atrás de su cabeza como si fuera una corona y además se notaba que su verdadero color era purpura, eso lo podía pasar por alto, pero su voz, era tan antinatural.

Alistair cayó sobre su trasero en la arena del desierto mientras le temblaban las piernas.

- Eghh…

La herida de Alistair todavía no había sanado totalmente, y no podía hacer movimientos bruscos.

- ¿Estás bien? No te sobre esfuerces.

Alistair vio lo preocupada que estaba Nilo, por lo que su corazón no podía dejar de latir.

- Gracias…

Nilo le dio su hombro para que Alistair se apoyara mientras caminaba y pudo ver como el dragón purpura (cubierto de polvo) hacia una ligera sonrisa por alguna razón y eso lo molesto bastante.

- Bueno, vamos donde mi abuela, ella me dijo que te llevara cuando despertaras, quiere verte por alguna razón.

- Bueno, vale… ¿Y tu abuela es?

- Es algo así como la líder de la aldea.

- Ya veo, bueno vamos.

Mientras dejaban atrás la tienda donde había estado descansando se dirigieron hacia otra tienda que tenía un aire distinto, más que un lugar donde dormía un líder, era más como un lugar tenebroso.

La tienda tenia algunas flores a su alrededor en macetas, y claramente era más grande que las demás tiendas de la aldea, adornada con algunas figuras pequeñas en madera que parecían ser personas pero otras no tenían formas humanoides.

Alistair estaba claramente nervioso, en otras circunstancias no tendría miedo, pero ahora estaba totalmente indefenso, pero Nilo Azul lo calmo.

- No te preocupes, mi abuela es muy amable.

- ¿Y cómo se llama tu abuela?

- Se llama Naira, Naira Cielo.

- Naira… Cielo.

Ambos entraron a la tienda de aspecto tenebroso.

Parte 3

Dentro de la tienda de aspecto tenebroso se encontraban pequeñas figuras humanoides colgadas con cuerdas, otras figuras parecían ser de 3 bestias luchando entre ellas y en medio una figura de lo que podría ser un águila colgando de un hilo, algunas figuras como estrellas o parecidas a hexagramas sobre una estantería, algunos frascos ordenados cuidadosamente, y en el centro de la tienda, lo que era una fogata pero estaba apagado y expulsado un poco de humo, y atrás de esta se encontraba una mujer de edad avanzada sentada sobre un trozo de tela en el suelo, esta mujer tenía cabello blanco, un poco robusta, los ojos pequeños y piel arrugada, normal en mujeres de su edad, fuera cual fuera.

La anciana paseo su mirada por todo el cuerpo de Alistair a lo que este no puedo evitar sentirse algo incómodo. La anciana seguía viéndolo fijamente mientras fumaba una pipa que tenía pequeños grabados de figuras que parecían ser de alguna cultura antigua, expulso humo por la boca y hablo con una voz algo gruesa y un poco rasposa.

La anciana hizo una señal con su mano para que Alistair se sentara a lo que este entendió el mensaje y se sentó sobre la enorme tela.

- ¿Y cómo está tu padre?

- ¡¡!!

¿Padre? Era algo que Alistair no había pensado nunca, ella conoció a su padre.

- ¿Conociste a John?

John era el nombre del padre de Alistair, al menos de su padre adoptivo, pero la respuesta de la anciana lo dejo totalmente congelado, con un nudo en la garganta incapaz de responder.

- ¿John? No recuerdo que ese fuera su nombre, aunque lo vi hace muchos años así que podría estar fallándome la memoria.

Las palabras de la anciana tranquilizaron el corazón de Alistair, o eso pensaba, pero luego la anciana se corrigió.

- Es mentira.

- ¡Oye!

- Tu padre no se llama John, eso lo recuerdo claramente, un hombre cansado, aunque joven, tenía la mirada de un hombre que lo había perdido todo, y con él, llevaba en sus brazos un bebé de pocas semanas, ¿Qué clase de padre haría pasar por ese martirio a su hijo? A menos que no tuviera opción alguna.

- ¿Qué me…?

- Lo descubrí porque ambos tienen ese mismo color de cabello, blanco y ojos tan negros como la noche misma, y por si solo podría haber más gente así por ahí, pero otra cosa que nadie puede imitar, esa cicatriz en tu espalda.

- …

- La marca del dragón, un símbolo que solo tienen aquellas personas destinadas a cargar con el destino del mundo en sus hombros, hasta ese momento nunca había visto la marca en realidad, solo escuche leyendas, cuentos sin ninguna base, hasta ese día, no solo la vi una vez, vi a un padre y su hijo cargando el mundo en sí mismo.

- Mi padre…

Alistair estaba totalmente desconcertado, realmente nunca había pensado en ello, estaba conforme con los padres que le habían tocado a pesar de su prematura muerte, pero ahora, sentía que todo su mundo se derrumbaba.

Y se volvía a construir.

La abuela de Nilo siguió hablando.

- Tu padre se quedó aquí un par de semanas, no dijo mucho sobre lo que le paso, solo suplico por ayuda, alimento, medicina y lo que pudiéramos ofrecer, y eso hice, le brinde mi mano amiga, en esa época Nilo todavía era una bebé igual que tú, su madre falleció cuando la dio a luz…

Nilo no pudo evitar poner una mirada triste ante las palabras de su abuela.

- En esa época, otro bebé con quien jugar le hizo muy bien a mi nieta, aunque siempre parecía enojada, contigo hizo un clic, una conexión extraña que cuando tu padre se despidió semanas después, Nilo a pesar de ser una bebé, sintió esa separación y lloro una semana completa y luego de eso tardo bastante en volver a sonreír.

Nilo estaba impresionada, era la primera vez que escuchaba esta historia, Alistair miraba de reojo a Nilo pero no podía dejar de pensar en cuanto sabía esta anciana sobre su verdadero padre y la marca en su espalda.

- Oye… estás hablando mucho de mí, pero nunca te has presentado.

- Es verdad, jajaja, soy Naira, Naira Cielo.

- Naira… Cielo… y Nilo… Azul. Definitivamente son una familia extraña.

Nilo no pudo evitar poner una sonrisa algo rígida ante las declaraciones de Alistair pero este siguió hablando.

- Entonces, ¿Cuál es el nombre de mi padre? Mi verdadero padre.

- Eso es…

- …

- Algo que no te puedo decir.

La vieja Naira lanzo humo sobre el rostro de Alistair haciendo que este se incomodara aún más y tosiera un poco.

- Esa marca en tu espalda significa algo, no sé qué es lo que te espere, pero grandes hombres con esa marca han cambiado el mundo, para bien o para mal, entonces no siento que deba decirte el nombre de tu padre, no sé si vive o muere, no sé nada de él después de que se fue de la aldea, pero siento que si te digo su nombre, podría cambiar algo, así que no te diré, al menos no por ahora, quizás en el futuro sienta que los vientos del cambio soplen en una nueva dirección, chico.

Alistair luego de un gran suspiro, se puso de pie rápidamente y con claro disgusto.

- Estar aquí no me ayudara en nada, tengo algo que hacer…

A su mente vinieron recuerdos, recuerdos de sus días en la academia, sus compañeros, amigos, camaradas y Ana, el rostro de Ana mientras el caía al vacío desde la torre, ¿Qué le había pasado? ¿Algo sucedió mientras el no prestaba atención? ¿O siempre fue así y todo fue una fachada? Debía encontrar respuestas y volver al reino de la Lluvia.

- Se lo que paso con los Agrishkal, su comunidad ya no existe, y los responsables fueron el país de la Lluvia ¿verdad?

- ¿Cómo?

- Tengo mis contactos, y por la ropa que tenías cuando te encontramos, asumo que eras parte de su ejército, ¿cierto?

- Si…

- ¿Te arrepientes?

- Si… y mucho… Realmente pensé que estábamos haciendo el bien, a pesar de las negras intenciones del patriarca Godwin, a pesar de eso, yo…

Las lágrimas empezaron a salir de los ojos de Alistair, cayo de rodillas, apretó sus puños y golpeo el suelo con fuerza, rabia y arrepentimiento.

- Yo… ¡Realmente quería cambiar el país, quería que todos fueran felices, y solo traje más infelicidad, mis amigos, no sé cómo se encuentran, o si alguna vez fueron mis amigos! ¡Yo! ¡Yo!

Nilo que seguía de pie y hasta el momento solo actuaba como mera espectadora, rápidamente se arrojó hacia Alistair y lo abrazo por la espalda, a lo que Alistair quedo en shock.

- Tranquilo, no sé lo que has pasado, tampoco te conozco de nada, pero tus lagrimas no son falsas, realmente te arrepientes del mal que has hecho, y estaré aquí para apoyarte, siempre.

Esta chica que no lo conocía de nada, estaba aquí diciéndole que lo apoyaría siempre, Alistair sentía que no merecía esas palabras, realmente no las merecía, pero desde el fondo de su corazón salió un rugido lleno de dolor y culpa.

- ¡AAAAAAAAAAAAHHHHHHHH!

Parte 4

Así pasaron algunos días en la aldea del Sol.

Alistair se había adaptado rápidamente al estilo de vida de la aldea, había dejado atrás su ropa de soldado del reino de la Lluvia, ahora vestía una camisa de tela suave con cuadros de colores y un pantalón amarillo con un par de sandalias, realmente Alistair estaba tranquilo. Se dedicaba a traer agua de un pozo cercano para los habitantes de la aldea, claramente no lo hacía solo, iba con Nilo y con el dragón purpura, Akutah.

Nilo y Alistair estaban sobre el lomo de Akutah aunque volaban a muy baja altura por consejo de Naira, en estas tierras desérticas hay muchos bandidos que atacan a los que se transportan para robarles sus cosas, estos bandidos a veces tienen dragones.

Ya se veía a lo lejos la zona boscosa donde estaba el lago, enormes palmas sobresalían en este desierto. El dragón purpura aterrizo y se fue a volar alrededor para ver que no hubiera nada extraño mientras Alistair y Nilo caminaban hasta el lago.

Alistair estaba un poco nervioso pero aun así hablo.

- Oye, Nilo.

- ¿Sí? Dime.

- Hasta el día de hoy, no te eh agradecido por lo de aquel día.

- ¿Aquel día?

- Ya sabes, cuando conocí a tu abuela y todo lo que sucedió luego.

- Ah eso, bueno, veras, sentí que necesitabas ayuda, a veces me culpo por la muerte de mi madre, aunque no fue realmente mi culpa, no puedo evitar sentirme culpable, si yo no existiera ella estaría viva, y realmente espero que alguien algún día me abrase y me diga que todo estará bien, tal como lo hice contigo, aunque eso no ha pasado, jeje.

- Yo…

- ¿Mmm?

- Yo, te protegeré, te compensare, ¡Estaré siempre a tu lado! ¡Nunca te lastimare!

Nilo puso su mano sobre su boca y soltó una ligera sonrisa.

- Gracias, Alistair.

Luego de eso, no hubo nada más relevante hasta llegar al lago, era un lugar hermoso, las palmas bloqueaban casi todo el sol desértico y solo dejaban entrar algunos rayos que se reflejaban en el lago dándole un hermoso aspecto.

Nilo tomo aire y grito.

- ¡AKUTAH! ¡Ahora!

Luego de eso, las palmas se empezaron a mover en todas direcciones y una nube de polvo se levantó. En medio de las hojas de las palmas fue bajando un enorme balde de madera atado con una cuerda, aunque no lo vieran, por encima de ellos estaba Akutah volando listo para cargar el agua para la aldea.

El balde se sumergió en el lago rodeado de flora y luego salió para sacar una gran cantidad de agua en él, haciendo que se formaran pequeñas olas que salpicaron a Nilo y Alistair.

En medio de las hojas y el movimiento pudieron ver dos figuras tomando un baño en el lago completamente desnudas, eran dos chicas, ambas con curvas sensuales, el agua escurría de sus hermosos senos, piel clara y ojos negros, pero lo que más destacaba de estas dos mujeres no era su piel clara o grandes senos, era el color de su cabello, una lo tenía de color naranja y la otra de color azul, no era algo común ver esos colores de cabello en esta área, o más bien, ni Alistair ni Nilo habían visto esos colores antes.

Alistair no pudo evitar sonrojarse al ver los hermosos cuerpos desnudos de las chicas, y Nilo se dio cuenta de esto a lo que en respuesta uso sus dedos y pico los ojos de Ali.

- ¡Mierda! ¡Mis ojos! ¿¡por qué!?

- Tu sabes la respuesta… idiota pervertido.

- ¡No es mi culpa, se atravesaron en mi campo visual!

- No trates de justificarlo, pervertido.

Mientras que Nilo y Ali discutían, las dos chicas desnudas de cabello naranja y azul se acercaron lentamente mientras nadaban por el lago. Una vez en la orilla, las dos chicas se acercaron a ellos tranquilamente mientras aún seguían desnudas.

Alistair aun con los ojos un poco enrojecidos y con lágrimas por el ataque de Nilo, miro a las chicas a la cara.

La de pelo naranja hablo.

- ¿Te gusta lo que ves?

Sin que Alistair supiera que responder, la chica de pelo naranja empezó a manosear sus pechos y mover sus manos lentamente a su entrepierna.

PLAP.

Un golpe llego a la cabeza de la chica naranja, el golpe venia de la chica de pelo azul.

- Disculpen a mi amiga, es una degenerada de mucho cuidado, pero todavía es virgen.

- ¡Oye, no digas eso, el chico no necesita saberlo!

La chica de pelo azul era muy refinada, parecía de la realeza, pero eso no quitaba que se disculpaba mientras seguía desnuda frente a ellos.

Alistair no sabía cómo reaccionar hasta que llego otro ataque a sus ojos, nuevamente de Nilo.

- ¡Mis ojos! ¡Mis ojos! ¡Mis ojos!

La chica refinada de cabello azul se presentó gentilmente.

- Mi nombre es Myrrene, y mi degenerada amiga es Lysera.

Nilo se pudo dar cuenta de algo, la chica de cabello azul, definitivamente estaba mal de la cabeza igual que su amiga. Ella apretó los puños y hablo.

- ¿Por qué…? ¿Por qué mierda no se ponen ropa?

Las dos chicas respondieron al unísono.

- ¡Ah, es verdad!

- ¡Ah, es verdad!

Parte 5

Ya había pasado un rato desde que Alistair y Nilo se encontraron con Lysera y Myrrene (Chica de cabello naranja y chica de cabello azul respectivamente), ambas chicas ya se habían puesto su ropa, pantalones oscuros con rodilleras de acero y canilleras con botas de cuero, Lysera tenía una camisa amarilla de tela y sobre esta hombreras de acero y coderas, la vestimenta de Myrrene era similar, solo que su camisa era de color vino tinto.

Una vez las dos chicas estaban vestidas, Nilo entablo una conversación con ellas sentadas sobre un tronco mientras que Alistair todavía le lagrimeaban los ojos, mientras tanto, el dragón purpura (Ahora mayoritariamente color tierra) Akutah, había aterrizado cerca del pequeño bosque protegiendo el balde de agua gigante que había recolectado.

Luego de toser un par de veces, Nilo empezó la conversación algo precavida a lo que preguntaba, realmente no pensaba que podrían responder o hacer estas dos chicas.

- Myrrene y Lysera, ¿verdad?

- ¡Sí!

- ¡Sí!

- No respondan al mismo tiempo… No es necesario, enserio.

- Está bien.

- Está bien.

- Como sea, retomemos…

Nilo solo había cruzado dos frases con estas chicas y ya se sentía cansada, no podía seguirles el ritmo, pero aun así decidió continuar la conversación.

- ¿Qué están haciendo aquí?

Lysera respondió rápidamente antes de que Myrrene pudiera decir algo siquiera.

- Bueno, simplemente viajamos por el mundo, o bueno estos continentes, nos falta explorar el resto de los principales países.

- Pero más allá de los 8 reinos no hay nada.

- Te equivocas.

- ¡!

Alistair puso especial atención a lo que decía Lysera.

- La ‘’Tierra Oscura’’.

- Ustedes…

- Y más allá de la tierra oscura, quien sabe, pero realmente no creo que solo existan los 8 reinos principales, no creo que el mundo sea tan pequeño.

Ante las palabras de Lysera, el corazón de Alistair empezó a latir con fuerza, este par de chicas excéntricas que no compartían nada en común entre ellas, tenían un sueño, una meta, conocer el mundo, y ya lo habían puesto en marcha para cumplirlo, pero el, que había hecho, decía que quería cambiar el Reino de la Lluvia desde adentro, pero ¿Qué había hecho para logarlo?, y peor, ahora estaba fuera del reino, nunca estuvo más lejos de su objetivo.

Alistair se metió en la conversación.

- Yo… tenía una meta, y no pude cumplirla, lo perdí todo sabes, pero hace poco me di cuenta que tenía un padre, y podría estar todavía vivo, así que…

Alistair apretó sus puños mientras miraba al par de chicas que ya estaban en proceso de cumplir sus sueños.

- Yo buscare a mi padre, no importa donde este, aunque no lo conozco, dudo que fuera alguien tan débil, y le preguntare porque me abandono y como era mamá y muchas otras cosas.

Lysera y Myrrene se miraron la una a la otra y luego miraron a Alistair y le sonrieron.

- ¡Tú puedes! ¡Joven degenerado!

- ¡Tú puedes! ¡Joven degenerado!

Alistair no pudo evitar poner una sonrisa forzada ante las palabras de ánimo de las dos chicas, mientras que Nilo Azul miraba a Ali con una sonrisa algo nostálgica, o quizás triste.

Apagaron la fogata y todo el grupo se acostó a dormir.

La mañana llego nuevamente, todos estaban preparadas y ya fuera del oasis listos para escoger sus caminos.

Alistair y Nilo les habían dado a Myrrene y Lysera provisiones para el camino, aunque se ofrecieron a llevarlas hasta un pueblo cercano, ambas se negaron, ellas querían disfrutar el camino y no tomar atajos, pero igualmente les agradecieron la intención.

Myrrene y Lysera se despidieron enérgicas como siempre y se fueron corriendo por alguna razón, a lo que Nilo dio un pequeño suspiro y hablo.

- No creo que lo mejor sea irse corriendo a mitad del desierto.

- Déjalas, ese es el estilo de vida que escogieron.

Nilo pudo notar que luego de la conversación de anoche con las dos chicas, Alistair había cambiado, no sabía de qué forma, pero era un poco más maduro.

Alistair miro al enorme dragón a sus espaldas, Akutah y camino hacia él.

- Bueno, ¿nos vamos? Nilo.

Ambos subieron al lomo de Akutah para llevar el agua a la aldea del Sol.